Biblioteca del
Conocimiento Oftalmológico
Queratoprótesis – Cornea Artificial
Una opción cada vez más temprana
La córnea es la parte más anterior del ojo, y es la encargada de ayudar a enfocar las imágenes adecuadamente en la retina: para esto tiene dos propiedades fundamentales que son la transparencia absoluta y el poder refractivo.
Cuando la transparencia de la córnea se pierde, recurrimos a diversas cirugías entra las cuales está el trasplante corneal.
La QUERATOPRÓTESIS es una córnea artificial que se implanta en casos especiales en los cuales no es posible realizar un trasplante de córnea, o en los cuales el pronóstico del mismo es malo.
Es una cirugía compleja, que ha venido ganando espacio dentro de los procedimientos quirúrgicos de la córnea con el paso de los años, pues ha demostrado excelentes resultados en diferentes enfermedades corneales y en diversos grupos de investigación a nivel mundial.
Hay diferentes tipos de queratoprótesis, las cuales varían no sólo en el diseño propiamente, sino en el material empleado el cual puede ser Polimetilmetacrilato (PMMA), Silicona, o fragmentos de hueso y diente del mismo paciente, entre otros.
La Queratoprotesis
La queratoprótesis que he estado implantando desde hace ya varios años es la denominada «QUERATOPROTESIS TIPO BOSTON 1».
Es el modelo de queratoprótesis más implantado a nivel mundial, fue desarrollada en la Universidad de Harvard por el Dr Claes Dohlman y ha sido utilizada por diferentes grupos de oftalmólogos en diferentes partes del mundo con excelentes resultados.
Esta es una queratoprótesis que consta de tres componentes y su material es PMMA y titanio.
Para su implantación se debe contar con una córnea donante (denominada Córnea Transportadora) sobre la cual se ensambla la prótesis como tal.
Y luego el complejo queratoprótesis-córnea es suturado en el ojo del paciente de manera muy similar a como se sutura un trasplante de córnea convencional.
Ejemplos de ojos con Queratoprótesis de Boston tipo 1:
Foto 1
Foto 2
Quienes necesitan una queratoprótesis
La cirugía
La cirugía se realiza bajo anestesia general, de manera ambulatoria. Consta de dos partes: el ensamblaje de la queratoprótesis y la fijación del complejo queratoprótesis-córnea transportadora al ojo del paciente (En YouTube buscar bajo el nombre lfmejiamd o www.youtube.com/watch?v=LhUVp7L6Kn0#t=42).
Tiene una duración aproximada de 1 hora y no duele al despertar.
El paciente es dado de alta de la clínica con el ojo ocluido, y con una cita de revisión al día siguiente para destaparle el ojo y verificar que todo se encuentre en orden.
El postoperatorio
Una de las muchas ventajas de la queratoprótesis es que la recuperación de la visión es muy rápida. De hecho, es mucho más rápida que en los casos de un trasplante de córnea convencional, y al cabo de unas pocas semanas los pacientes están alcanzando la totalidad del potencial visual del ojo.
Los primeros controles se hacen semanalmente, luego mensualmente y luego se van espaciando hasta hacerlo una vez cada 6 meses.
Durante los primeros meses debe utilizar unos colirios de antibiótico y anti-inflamatorios en dosis altas para lograr una rápida recuperación y evitar complicaciones.
Estabilidad y Seguridad
La Queratoprótesis tipo Boston 1 es reconocida mundialmente por su excelente estabilidad y seguridad durante años luego de la cirugía.
Si el resto del ojo se encuentra en buen estado, la visión que se obtiene es muy buena, es rápida, es estable y con un campo visual (amplitud de visión) amplio.
Su compromiso
Recibir una queratoprótesis es un verdadero privilegio en nuestro medio, pero también implica un compromiso suyo como paciente para cuidarla: esto lo hace utilizando un lente de contacto permanente encima de la misma (puede ser de color para semejar el color del ojo contralateral) y aplicándose una gota de antibiótico y otra de antiinflamatorio de por vida para evitar infecciones e inflamaciones indeseables.
PACIENTE A
Foto Preoperatoria
Foto Postoperatoria
PACIENTE B
Foto 1
Foto 2
